Comenzamos con la publicación semanal del material que hemos recuperado en este tiempo.
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(1) Tringov,Georgi P - Fischer,Robert James [B97]
Capablanca Memorial Havana (5), 1965
[Bolbochán, Julio]
La Nación, 3 de agosto de 1969Frente al tablero . Escribe Julio Bolbochán .
La imposible!
Robert Bobby Fischer, sin duda el valor más genial del mundo occidental, enfrentará en tiempo y lugar por designar al ex campeón del mundo Mikhail Botvinnik en un match organizado por la Federación Norteamerica de Ajedrez. La noticia, proporcionada por ciertos dirigentes soviéticos, creó gran expectativa, por la calidad de los contendientes y por el interrogante que suscita el enfrentamiento de tales figuras. . Si Fischer -26 años- demostró en sus últimas actuaciones estar en la plenitud de su forma, otro tanto puede decirse de Botvinnik, un veterano del tablero -58 años-, pero quién con posterioridad dio abundantes pruebas de su maestría. . Fischer, dotado de un espíritu inquieto, reconocido investigador de las aperturas en su más mínimo detalle, ¿podrá oponer con éxito su calidad ante el estilo científico y siempre vivaz de Botvinnik?
Sucedió una tarde de febrero de 1962, durante el desarrollo de la 5a rueda del torneo Interzonal de Estocolmo. El gran maestro Húngaro Istvan Bilek enfrentaba a Fischer, y con las piezas blancas planteó el ataque Gotemburgo para castigar la defensa Siciliana opuesta. . Según la opinión de los teóricos de aquella oportunidad, la variante era considerada ganadora para Bilek, pero al adoptarla Fischer, quedó sembrada la duda entre los participantes. . Pero, además, un hecho curioso llamó poderosamente la atención: Bilek, después de conocer la novedad, (15...h6), meditó hasta que sus agujas registraron 2 horas 28 minutos, restándole apenas dos minutos para ejecutar 24 movimientos, mientras que Fischer, jugando prácticamente al "toque" tenía marcada en su esfera 2 minutos. . Naturalmente, la impaciencia y nerviosismo de uno contrastó con la manifiesta seguridad del otro, y si a ello agregamos las miradas de inteligencia que se cruzaban entre los participantes, queda bosquejado el panorama presentado. . A esa altura del encuentro, Fischer "sobró" a su adversario y se aventuró a jugar una sublínea peligrosa. De haber tenido tiempo, Bilek hubiera triunfado. Pero erró, y su flecha, al caer, señaló su revés por extralimitarse en el tiempo reglamentario. Habían transcurrido 27 jugadas.
Fischer jugó el IV Torneo Memorial Capablanca, que se desarrollo en La Habana, desde uno de los salones del Marshall Chess Club de Nueva York, transmitiéndose sus movidas por un servicio de teletipo. Cuando enfrentó al gran maestro búlgaro Georghiu Tringov, Fischer volvió a maravillar al mundillo del ajedrez al adoptar una variante considerada perdidosa para él. Es más: cuando el genial norteamericano envió su jugada 18a, el búlgaro solicitó la rectificación considerando que esa movida constituía un error de transmisión. Pero Fischer no sólo no la rectificó, sino que la ratificó, y cuatro jugadas después obligó al abandono.
Partida No 58:
Blancas Tringov, Negras, Fischer.
Peón Rey, defensa Siciliana, variante Opocenski-Najdorf, ataque Gotemburgo.
1.e4 c5 2.Cf3 d6 3.d4 cxd4 4.Cxd4 Cf6 5.Cc3 a6 6.Ag5 e6 7.f4 Db6 . La jugada del texto, y [7...b5 son continuaciones que con mayor frecuencia emplean las negras para combatir el ataque Gotemburgo, tan agudo y que tantos reveses ha ocasionado.] 8.Dd2 . La entrega de peón es característica de la variante y tiende a lograr un rápido desarrollo de piezas aprovechando la posición precaria de la dama negra. 8...Dxb2 9.Tb1 Da3 10.e5 dxe5 11.fxe5 Cfd7 12.Ac4 Ab4